martes, 28 de febrero de 2012

Martes de la Primera Semana de Cuaresma en Santa Anastasia


Se conoce muy poco sobre la historia de esta santa. Lo único que sabemos de ella es que fue martirizada en lo que hoy conocemos como Serbia y que ya en el siglo V había una gran devoción por ella en Roma.
Esta iglesia se encuentra enseguida al circus Maximus, uno de los grandes y más importantes símbolos del imperio Romano. Lo cierto es que aquello hoy son ruinas, pero la fe que se trato de apagar en sus espectáculos aun persevera, esta iglesia es un buen testimonio a esta verdad.

Oración colecta

Padre compasivo,
mira a tu familia y al vivir penitencialmente,
haz que nuestra alma resplandezca con el deseo de poseerte.
Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo,
que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo
y es Dios, por los siglos de los siglos.






lunes, 27 de febrero de 2012

Lunes de la Primera Semana de Cuaresma en San Pedro en Cadenas


La graciosa iglesia de san Pedro en las cadenas fue, probable una de las primeras parroquias de Roma. El primer templo de culto divino construido aquí fue, tal vez, en el siglo V. en esta iglesia se veneran las reliquias de las cadenas con las cuales ataron a San Pedro en Jerusalén, luego se unieron a las usadas en su aprisionamiento en Roma. El tesoro artístico de San Pedro en las cadenas es la tumba sin terminar y sin usar del Papa Julio II, que incluye el Moisés de Miguel Ángel.

Oración Colecta

Conviértenos a ti, Dios salvador nuestro,
e ilumínanos con la luz de tu palabra,
para que la celebración de esta Cuaresma
produzca en nosotros frutos abundantes.

Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo,
que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo
y es Dios, por los siglos de los siglos.

Portico renacentista de la iglesia de San Pedro en las cadenas

vista general de la nave central

Reliquia de las cadenas de San Pedro en el altar mayor

Baldoquino cubriendo el altar. Mi estilo favorito de altar!

Fresco representando la liberacion de Pedro por el angel. 

Habla! Moises de Miguel Angel en la tumba nunca usada del Papa Julio II

Primer Atardecer: La Tentación





Oramos con Jesús en el salmo 60: Dios mio, escucha mi clamor, atiende a mi suplica. Te invoco desde los confines de la tierra con un corazón abatido. Y comenta San Agustín: “¿Y cual es el motivo de esta suplica? Porque tiene el corazón abatido. Quien así clama demuestra que esta en todas las naciones de todo el mundo no con grande gloria, sino con graves tentaciones”. Pero ¿si Jesús cayera en la tentación, que seria de mí? Un pobre sin redención. La grandeza y virtud en las tentaciones es que Jesús pudo decir que si a todas. Así como el atardecer busca a la noche, la tentación busca a mi oscuridad. En todos estos atardeceres debemos ver a Jesús completamente tan humano como cada uno de nosotros. Y en El, si se puede decir no a la tentación. Sin embargo en la tentación estamos tan solos y somos tan nosotros como en la muerte. La dicha que experimento con un no a ellas es que mi humanidad la confronto con la de Jesús y me vuelvo tan El que no quiero dejar de ser El.  

Jesús entrada la noche se retiraba a orar; es decir, después del atardecer y sin la luz, el único remedio de pasar el amargo trance de la noche es solo buscando a Dios.  La caída del día lo ha portado allí. El enrojecimiento de la estrella tutelar, cuando destella arreboles, anuncia la vecindad de la oscuridad. Para ello nos preparamos en defensa; nos armamos entonces de lámparas, luces y bombillos que pretenden suplantar, en minutísima escala, la labor de la luz del sol que se extingue. Pero hace suspirar e invita a la nostalgia del cielo perdido, nostalgia de Dios. No se quiere cerrar los ojos a tan dramático fenómeno porque la contemplación en que nos envuelve nos lleva a la noche, no ya armados de linternas sino también despojados de cualquier banal seguridad.

Que me lleva a temer la perdida del día, sino la certeza de no haber terminado lo empezado, de no haber amado lo ofrecido y despreciado lo ofendido. Bendito atardecer que me refriega la culpa en la cara y no me deja tocar la noche sin antes arrepentirme. Cae el sol, si! Caigo yo también, cansado y afligido. El día se va y no regresara. Yo sigo con el sucesivo. Digo entonces no a mi tentación, que nunca será mas grande que mis fuerzas, porque me porta a la búsqueda de Dios que me quiere como el.

Atardeceres





Durante el descanso escolar de la navidad, tuve el privilegio de pasar 8 días con los monjes Trapenses del monasterio de Nuestra Señora del Santísimo Sacramento en Frattocchie, hacia las afueras de Roma. Aquellos días quedaran para perpetua memoria en mi alma como días de profunda reflexión y fervor. Allí me encontré con una bella biografía en italiano del Hermano Rafael, mi querido compañero San Rafael Arnaiz, novicio trapense de la Abadía de San Isidro de Dueñas en España, quien murió a la temprana edad de 27 años en abril de 1938.

Yo conocí al hermano Rafael a través de otro amigo mio: el padre Damián de Molokai. No sabía yo nada de Rafael hasta el mismísimo día de su canonización, pues supo estar canonizado por el papa Benedicto XVI en la misma ceremonia con el padre Damián y otros tres santos más. Aquella fue mi primera vez en Roma. El hermano Rafael no necesito dirigirme ni una sola palabra para llamarme la atención y cautivarme. Su imagen presentaba un semblante tranquilo y una mirada tan serena y compenetrate como la de alguien que solo posee a Dios en si mismo. Usted sabe, improbable lector, fue algo así como lo que llaman hoy día química, en las relaciones interpersonales, para querer decir que hay una profunda conexión e identificación entre dos personas. No soy pretensioso, no digo identificación como si yo fuera ya igual a Rafael, sino porque solamente aquel, su rostro, colgado del balcón de la logia de la Basílica de San Pedro, me inspiro a decir a mi mismo: yo quiero ser como el.  

El libro que encontré parece que fue escrito en ese mismo monasterio donde me encontraba. Al terminar de leer las primeras paginas del capitulo introductorio, me di cuenta que era la misma biografía que ya había leído en ingles unos meses después de la canonización, biografía que por cierto había comprado en una visita rápida al Monasterio de New Melleray en Dubuque, Iowa; lugar también tan cercano a mi corazón. Fue allí donde tome la decisión de ser sacerdote para mi providencial arquidiócesis de Chicago.

No me importó que fuera el mismo libro, lo leí de pasta a pasta, y una vez mas, Rafael me acompañó por una semana y me contó cosas graciosas como solo él puede hablar, cosas de Dios que se pueden contar con humor. Lo que aun yo no podía comprender, es por que razón nunca había podido conseguir sus obras en el original español. (Mas tarde, apenas hace un par de semanas, recibí un libro de las Obras completas de Rafael, agradable sorpresa de la gentileza de don Antonio, padre del padre Juan Jesús. A don Antonio aun no lo he conocido, a su hijo lo conocí hace poco en Roma y es originario precisamente de la región de Valladolid, la misma de Rafael). No se imaginan la delicia de leerlo, es como masmelos asados que se derriten en el paladar.

Lo cierto es que durante aquella semana de fin de año descubrí lo mucho que Rafael y yo tenemos en común: tan hombres de carne y hueso con pasión por Dios y la Señora y tan perezosos los dos para levantarnos por las mañanas.  Estoy hablando de cuando él no era santo aun, o sea, de cuando Rafael era mas como yo. Esto si que me da esperanza.

Tanto las auroras como los atardeceres son mis momentos favoritos del día, porque son momentos de trascendencia que reclaman contemplación e incitan a la alabanza del creador. Pero como en mi vida he visto mas atardeceres que auroras, porque todavía no me levanto a ver salir el sol, me quedo por ahora con los atardeceres hasta que aprenda a madrugar de verdad. Mi única dificultad con la imagen propuesta, es que los atardeceres buscan la noche y con ello, las tinieblas se imponen al día que fenece. En el transcurso de los días finales del 2011, me dio por sacar la cámara fotográfica y registrar todos los atardeceres de aquella semana misteriosa pero sabrosa. Ahora es que me atrevo a exponerlas, porque es solo hasta estos días que me siento con la confianza también de compartir reflexiones sobre atardeceres. Vamos a dejarnos guiar e impregnar de ello durante la cuaresma, que es como un atardecer que busca la noche de la muerte fría y oscura que luego es superada con creces con la aurora del Domingo Mayor, una vez y para siempre. Ya creo yo, que para entonces, después de despojarme de mi mismo, tendré la suficiente valentía y motivación para levantarme a contemplar el alba.

Alternando con las iglesias estacionales quiero presentar, cada domingo cuaresmal, un atardecer para meditar. 

sábado, 25 de febrero de 2012

Cuarta Estación: Sábado depués de ceniza en San Agustín


Hoy estamos mas hacia el centro de Roma, entre la algarabía de la Piazza Nuovona y un poco mas allá del Panteón, encontramos la iglesia de San Agustín, bella ejemplar del renacimiento italiano. Lo especial de esta iglesia es que aquí tenemos el cuerpo de Santa Mónica, madre de Agustín. “Un hijo de tantas lagrimas y oraciones jamás podrá condenarse” le dijo el obispo Ambrosio a Mónica una vez que se encontraron. Santa Mónica nos ensena la perseverancia y la insistencia en la oración. Cuando todo parece acabarse, ora. Y si no pasa nada, entonces ora incluso más. Y si aun nada acontece, pues ora, ora y ora. Este es un templo que honra la labor intercesora de la Madre.

Oración colecta

Dios todopoderoso y eterno,
mira compasivo nuestra debilidad
y para protegernos,
extiende sobre nosotros tu mano poderosa.
Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo,
que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo
y es Dios, por los siglos de los siglos.

Fachada de la iglesia de san Agustin, construida con materiales traidos del coliseo.

Interior de la iglesia

Altar Mayor, obra de Bernini, contiene una imagen de Nuestra Señora

Capilla de la tumba de Santa Mónica. Digno es hacer una pausa aqui, donde yace esta mujer que nos dio a uno de los santos mas grandes de la Iglesia, su hijo Agustin por quien es llamado este templo.

Capilla de la tumba de otro santo Agustino, San Nicolás de Tolentino.

Fresco de Rafael: El profeta Isaias. Debajo se ve una escultura de Santa Ana con la Virgen y el Niño.

y en la capilla final, encontramos la obra de arte mas importante aqui: La Madonna de los peregrinos de Caravallo. 

Tercera Estación: Viernes depués de ceniza en la basilica de los Santos Juan y Pablo


La estación de hoy la hacemos en una iglesia espectacular: Santos Juan y Pablo. Es sorprendente la diligencia con que se conserva y mantiene, crédito a los padres Pasionistas, que han llamado a esta basílica y convento adyacente su casa desde tiempos del fundador. La iglesia fue construida encima de un área residencial de la Roma antigua, justo donde los santos mártires, los hermanos Juan y Pablo murieron y fueron sepultados. Todo esto sucedió poco después de la legalización del cristianismo, pero ya públicamente dividida por controversias teológicas. El emperador Julian se quedo mejor de hereje y condenaba a muerte a quien se mantuviera ortodoxo a la sana doctrina cristiana. Tal vez por esto, el emperador ejecuto a Juan y Pablo en la privacidad de la  propia casa de los futuros santos.
Debemos estar atentos a las herejías contemporáneas y no dejarnos alejar de la fe verdadera y las costumbres que nos mantienen unidos en ella.

Oración colecta

Padre misericordioso,
acompaña con tu benevolencia
los primeros pasos de nuestro camino penitencial,
para que nuestras prácticas exteriores
expresen la sinceridad de nuestro corazón.
Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo,
que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo
y es Dios, por los siglos de los siglos.

Padres de la casa Santa Maria en peregrinacion, temprano en la mañana, hacia SS Juan y Pablo

Fachada vista desde la plaza

Altar mayor

Altar mayor con las reliquias de los santos Juan y Pablo.

Detalle en el techo representando a los santos martires hermanos

Altar de San Pablo de la Cruz, fundador de los Pasionistas. Sus restos estan aqui.

Detalle en el vitral del emblema pasionista. 

Segunda Estación: Jueves depués de ceniza en San Jorge


La humilde iglesia de san Jorge se esconde casi que pensativa y tímida detrás del arco dedicado a  Caracalla. Originalmente era dedicada a San Sebastián, pues cerca a este lugar esta la cloaca máxima, donde se cree fue arrojado el cuerpo del soldado romano después de su martirio. Poco después de construirse un lugar de culto aquí, ya en los tiempos de la legalidad del cristianismo, la iglesia de San Jorge sirvió como una diaconía. Esto quiere decir, que era un lugar para dispensar bienes y servicios a los pobres de la ciudad.

En el siglo VIII, el papa Zacarías, trajo el cráneo de San Jorge, martirizado por el emperador Diocleciano. Después, entonces, la iglesia recibió el nombre compuesto de Sebastián y Jorge, pero hasta hoy nos ha llegado la referencia de llamarla solo de san Jorge.

Aquí, pues nos encontramos y veneramos a san Jorge. Muchas de las historias de este santo, también soldado, son más producto de la ficción que de la realidad. Lo cierto es que fue santo y martirizado también por Diocleciano por ser confesarse cristiano. A veces me pregunto: seria yo capaz de hacer lo mismo? Morir por ser creyente en Jesucristo. No estamos lejos de volver a esos tiempos.

Oración colecta

Que tu gracia, Padre,
inspire y acompañe nuestras obras,
para que comiencen en ti como en su fuente
y tiendan a ti como a su fin.
Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo,
que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo
y es Dios, por los siglos de los siglos.

Frontis de la iglesia y algunos peregrinos departiendo despues de la misa. 

Nave central. La simplicidad de esta iglesia es evidente incluso en el reciclaje de columnas traidas de otros templos. Sin embargo el baldoquino en el altar, llama los ojos a enfocarlo atentamente. 

El arco de Caracalla, con todos sus nichos. Y atras, la torre de San Jorge.

Primera Estación: Miércoles de Ceniza en la basilica de Santa Sabina

La basilica de Santa Sabina se encuentra sobre la colina Aventina, a un lado del rio Tiber  y se asoma como si estuviera encima de los cuarteles de los Caballeros de Malta. Esta es una iglesia que habla en voz alta sobre la transición del uso original de basilicas en la cultura romana, a su uso como lugares de culto Cristiano. Aún conservan muchos elementos de la  austeridad de los edificios que las inspiraron. 

Esta iglesia fue construida en el Aventino porque, según la tradición, está cerca a donde viva Santa Sabina. Esta santa mártir, matrona romana, fue convertida a la fe por su sierva Serafina, ambas la vivieron hasta el punto mayor de derramar su sangre. Mas o menos por el año 126, las dos fueron condenadas a muerte por ser cristianas. Oremos mis queridos, para que el ejemplo radical de estas dos mujeres, nos animen a encontrar toda fuerza y esperanza no solo en la fe, sino precisamente en Aquel mismo a quien profesamos. 

Oración colecta

Señor y Dios nuestro,
concédenos la gracia de iniciar con el santo ayuno cuaresmal
un camino de verdadera conversión,
y afrontar con la penitencia la lucha contra el espíritu del mal.
Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo,
que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo
y es Dios, por los siglos de los siglos.



jueves, 23 de febrero de 2012

Santa Cuaresma y las Iglesias Estacionales




Mis queridos todos,
Esta santa cuaresma ya esta encima de todos. Pido a Dios que esta sea una temporada de renovación espiritual para todos, como debe de ser. Me parece, cada año, que cada vez debemos ser mas serios en la celebración de la Pascua, y vaya manera que tenemos de prepararnos! 40 días para tener un espíritu limpio y una consciencia tranquila para la alegría de la salvación. LA sabiduría milenaria de la Iglesia nos enseña que con las prácticas de la penitencia, la oración y la limosna lo podemos alcanzar. Atención! no se dice que con la oración O la limosna O la penitencia. Se dice que es con las tres juntas. Y la verdad que si funciona, creedme a mi que se los digo.

Aquí en Roma se nos promete una cuaresma que definitivamente es de alquilar balcón. Bueno, todo parece que es así con tanta historia y tradición alrededor. La cercanía a los santos mártires que derramaron su sangre por la fe, me han dado claro testimonio que la única manera de ser cristiano es serlo radical. Radical en el sentido de seriedad, y de decirle continuamente SI a Dios que siempre dice si con su amor por mi. Y decirle si a Dios es decir no al pecado que tanto nos atormenta y aleja del único bien verdadero. Bueno, no quiero salirme del tema de esta entrada. Lo que decía es que la cercanía a aquellos héroes de la fe, se evidencia en la tradicional y pia costumbre romana de las iglesias estacionales. Tenemos 40 iglesias para la cuaresma. Lo que quiere decir, 40 misas, en 40 iglesias, en 40 días!

Las misas estacionales tienen su origen ya en el siglo segundo cuando el obispo de Roma iba a decir misa en las diferentes iglesias que existían en la ciudad. LA celebración de estas misas era asociado a la festividad del día o al mártir venerado en ella. Ahora tenemos un orden de estas iglesias que nos vienen desde el concilio de Trento, por allá en el siglo XVI. Me gustaría clarificar que las misas estacionales son misas normales, celebradas con los mismos ritos que conocen. El termino estacional se refiere a la estación, o parada que el papa hacia después de una procesión para llegar a la iglesia. Obviamente la parada era en la iglesia de destino, y así se empezó a llamar iglesia estacional.

Aunque el papa ya no hace estos recorridos, si va aun a la primera iglesia, la iglesia de Santa Sabina, el miércoles de ceniza. Nosotros, sin embargo, para unirnos a la tradición y experimentar la fe de la ciudad, iremos todas las mañanas, antes de empezar el día, a celebrar las misas estacionales. Yo los quiero invitar a ustedes improbables lectores, a que se unan a mí en esta peregrinación, para que oremos juntos en la distancia y aprendamos también algo de los mártires y las iglesias de Roma.

Cada día les escribiré una pequeña reseña de la iglesia estacional del dia junto con la oración colecta de la misa del día.

Mucha fuerza y ánimos de verdadera conversión durante esta cuaresma!

El Señor los bendiga.